sábado, 16 de septiembre de 2017





DIFÍCIL DE ENTENDER

Siempre me juego a "tener memoria", pero sé que hay veces que nos juega en contra. Cuando no respetamos los entornos o contextos en el que guardamos la información. Algunos recuerdos se producen en situaciones que nos marcan de tal manera que son recurrentes, afloran "supuestamente" sin querer. Digo "supuestamente" porque normalmente participaron en su formación nuestros sentidos de forma plena. 
Retornando al tema en sí, o sea a la memoria y su asociación es lo que muchas veces nos lleva a que tengamos un prejuicio frente a determinados temas, cosa que nos ha pasado a todos en algún momento. Esto no implica ni una justificación ni una respuesta a actitudes nefastas.
Muchas veces he hecho mención a determinado episodio vivido en una reunión, con dos "compañeras" ambas muy representativas de mi fuerza política. Reconozco ser muy "memoriosa" y más cuando es frente un agravio sea hacia mi como a otra persona, (reconozco que si es a otra persona y es injusta mi reacción es totalmente "no" racional), algún defecto tengo.
Volviendo al tema, alguien MUY representativa anteriormente ya había tenido actitudes para nada educadas, que yo dejé pasar, pues la verdad no me interesaba ni que me quisiera y menos ser su "mejor amiga". Hasta ahí nada que me afectara tanto como para dejar de comer o dormir, sí un leve cuestionamiento a mí misma por no ser tan flexible como para aceptar esta nueva manera de "ser compañero" en el FA. Junto a esta candidata tan versátil, se encontraba una no menos famosa "compañera", muy reconocida escribiendo una carta para Venezuela, ya hace un tiempo de esto. Esta última compañera es muy reconocida en los medios escritos. Como hecho anecdótico y hablando de "literatos" y medios comunicacionales, les cuento que ella NO sabía la diferencia entre "ingerir" e "injerir" y hace años escribe en un medio muy conocido, ¡así estamos! Esta literata dictaba la carta, seríamos 12 los que nos encontrábamos allí, todos tenemos nuestro lado "malo" y el mío fue no sacar la duda del término que fue mal escrito. La carta era un desastre de sintaxis, y como yo digo, bastante "té con leche", esos que quieren decir y no dicen por no jugársela o por miedo a que lo escrito "enoje a la fuerza política", cito textualmente. Llegado a lo último de la carta hacen referencia al ejército venezolano...y fue ahí que para variar no pude callar, frente a mi llamado de atención a como se expresaban manifesté mi voto en contra, ocasionó que la Sra. Literata, (segura estoy ahora sabe la diferencia entre ingerir e injerir) culmina diciéndome pro-dictadura, pro-militar y que ella no quiere otra vez a los "milicos", dando a entender que yo sí me sentiría cómoda con ellos.  Bueno, fue tal mi indignación que no viene al caso explicar ni la dimensión, ni el por qué, solo diré que fue tan grande mi dolor que ni contesté tal agravio, solo confirmé que lo dicho, dicho estaba. NO VOY A HABLAR DE ÉTICA, POR LO MENOS EN ESTE ARTÍCULO, TAMPOCO DE LA RELACIÓN QUÉ TUVIMOS O TENGAMOS EN NUESTRO PAÍS CON AQUELLAS FUERZAS MILITARES, pero si me senté a rever artículos, conceptos, discursos llamando al "no odio" al que tanto tiempo se llamó. Solo quien tiene alguien desaparecido y sigue buscando puede entenderme en total magnitud. Compartido esto con Uds. agravio que jamás voy a olvidar.
Me referiré al porqué no entendemos el concepto de militares al servicio del pueblo como en Venezuela. Largas charlas con compañeros uruguayos que viven en Venezuela y con venezolanos realmente bolivarianos, me ha llevado a escribir sobre el tema.
Destaquemos que para nosotros Artigas es un busto, una fecha, unas frases usadas más veces en otros países que por nosotros mismos, alguna clase aburrida en la escuela, menos en secundaria y una hermosa bandera real y utópica cuando se necesita. Tema que dejo por ahí pues daría para mucho más.
Para los venezolanos de Chávez y Maduro, Bolívar es una forma de vida, es un pensamiento, un sentimiento, casi palpable cuando uno habla o está con ellos, todos sin importar su edad saben, conocen y se reconocen bolivarianos. Ellos me enseñaron, me mostraron lo que es un ejército del pueblo, voy a tratar de poner por escrito un sentir, espero por respeto a mis compañeros bolivarianos hacerlo de manera cercana a lo acertado.
El Comandante Chávez, no olvidemos él era un militar, construyo los cimientos de una Revolución dónde la unión cívica-militar la fortalece. Maduro continúa fiel a su legado, acá NO hay traidor, solo hay una persona distinta, solo eso. Esa unión cívico- militar es el núcleo que nos da la explicación en su casi totalidad de como logra un gobierno popular, (no es lo mismo que populista, como hacen creer los medios) se mantiene orgulloso en pie.
Un gobierno en pie para malestar de varios, gobierno machacado, acosado, cercado y permanentemente cuestionado (aún por los que deberíamos estar a favor), se mantiene firme ante todos los ataques, llámese EEUU, países "democráticos" Latinoamericanos, oposición derechista furiosa y asesina, doctorcitos, y señoronas llorando pidiendo injerencia, exfiscales en gira por gobiernos dictatoriales, OEA, o nuestro "compañero" del MPP (sin juicio político) Sr. Almagro. etc.
La Revolución Bolivariana, a diferencia de otras, cuenta desde su inició, por no decir gestación, a la fuerza militar quienes tienen las armas, esto es muy importante, tanto que la derecha rogaba que se unieran a ellos. Partiendo de lo histórico es que tenemos el preconcepto formado del término cívico-militar, siempre ha sido a favor de determinados imperios, salvo excepciones. Esta es una de ellas, quizás la más significativa.
Nuestro cerebro recobra nuestro pasado instantáneamente, recordamos la caída de Arbenz en Guatemala, Goulart en Brasil y hasta la muy cuestionada, con ríos de tinta corridos, merecedora de grandes textos de la caída de Perón. Las clases medias, los derechistas a ultranza, los oligárquicos, terratenientes, latifundistas, o como deseen, según el contexto, llamarlos, pactaron con los militares que de amor a la Patria solo tenían el juramento, (dedos cruzados), derrocando gobiernos elegidos por su pueblo.
En Venezuela es distinto, compañeros, es como ver la "la verdad verdadera", los militares tomaron conciencia que ellos también son pueblo, que no son una élite que no rinden cuenta a nadie, ellos son la Revolución. Quiero dejar esto bien claro, tomaron conciencia, SON PUEBLO POR LO TANTO SON LA REVOLUCIÓN.
La Historia siempre los pone como una fuerza independiente. Desde el tiempo más lejano existió el pueblo, la religión, la aristocracia (en sus diferentes denominaciones) y el ejército. Uno se pregunta ¿qué son? ¿una casta? Preguntas formuladas desde nuestra "modernidad".
En Venezuela se auto reconocieron por lo que realmente son: PUEBLO lisa y llanamente. Si no incorporamos esta realidad qué está sucediendo HOY, en este MOMENTO, no reconocemos un hito histórico. En el siglo pasado marcabas que tenías un "apellido" importante si tenías un hijo cura o hija monja, también lo marcó tener un hijo militar. Pero esto cambió quienes conforman el ejército en su mayoría son gente de pueblo.  No existe la famosa "imparcialidad" militar la Historia siempre termina uniéndoles a los poderosos y sus instituciones.
Latinoamérica es tan rica que nos damos el lujo de tener distintos "tipos" de fuerza militares: las que matan democracias activamente, las que observan como las matan de forma ¿pasiva? Como en Brasil, pero por suerte tenemos las que primero se autorreconocen desde su origen. Como tal actúan en Venezuela declarándose antiimperialista, bolivariana y por sobre todas las cosas orgullosas de ser quienes son: PUEBLO.
Recuerdo a Chávez en sus discursos, diciendo "un soldado es pueblo con uniforme" algo tan simple y sencillo, pero tan difícil de entender según parece en este Uruguay donde estamos perdiendo "solidaridad".  
Tienen más responsabilidad, tienen la obligación de no perder su autorreconocimiento, de no perder la conciencia de su origen, deben recordar que su juramento es con SU pueblo, con cada uno de ellos mismos. Están siempre en peligro, la llamada de la derecha a este ejército fue hecho varias veces. Como en todo siempre hay TRAIDORES y hasta medios de comunicación que les pague, pero eso es otro artículo, uno en el cuál tenga que depurar varias veces. Hoy les hablo de los que están orgullosos de quienes son y de qué son. Aquí resaltamos cuando ayudan en dificultades, como sucedió con el conflicto de ADEOM, y estoy agradecida, pero rechazamos la idea de un ejército que construya escuelas, viviendas, trabaje en lo social, en lo educativo, se preocupe por SU pueblo porque ELLOS SON EL PUEBLO.
Si reconocer esto significa que soy pro dictadura o pro militar, si fui y soy catalogada de TRAIDORA. Opinen lo que quieran. Mi conciencia está tranquila, PODRIA MIRAR FRENTE A FRENTE A MIS MUERTOS QUE ELLOS SI SABEN DE LO QUE HABLO, SEGURA ESTOY QUE ESTARÍAN DE ACUERDO. CLARO NO PUEDO HACERLO, LOS QUE ME LLAMAN TRAIDORA Y HABLAN DE ÉTICA VAN CASI TRES PERÍODOS DE GOBIERNO, PERO SIGUEN SIN ENCONTRAR A QUIENES LOS PUSIERON DONDE ESTÁN.
¡¡¡LA REVOLUCIÓN BOLIVARIANA ES UNA REVOLUCIÓN PACÍFICA, PERO NO DESARMADA¡¡¡

Prof. Laura Gatti

Nuestros Militares, eran considerados adornos para la oligarquía, como zarcillos para las viejas burguesas, los usaban un momento para reprimir de la manera más violenta inimaginable (caso el Caracazo) en donde más de 3000 mil personas fueron asesinadas en una semana de protestas ante las medidas que tomara Carlos Andrés Pérez junto al Fondo Monetario Internacional y las cuales sumieron al país en una crisis económica terrible para los más pobres.

Hoy nuestros Militares tienen derecho al VOTO, no se les permite militar en un partido político, pero si pueden ejercer su derecho de elegir y por sobre todas las cosas, a mantener su dignidad y su amor por Venezuela. 

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