Causas de una Derrota Anunciada

La situación que se nos presenta, el nuevo escenario después del proceso electoral del 6D, nos ha revelado no solo la corrupción dentro de nuestras filas. Una corrupción que casi logra destrozar lo que costo tantos sacrificios, incluso la vida de nuestro Comandante, Hugo Chávez, también nos revelo la estupidez del FASCISMO, personificada en sus principales líderes. El octogenario Henry Ramos Allup, el adefesio Chuo Torrealba, y sus amos de  Fedecamaras y Consecomercio, ellos dieron una patada gigantesca a quienes desde nuestras filas humildes se habían pasado abruptamente el día de las elecciones a votar por “La Manito”, pensando que esa manito resolvería la tragedia de las colas, la escases de la harina de maíz y del papel sanitario. Nuestros compatriotas olvidaron por ese día, que la manito que causaba el desabastecimiento y acaparaba los alimentos, era esa misma por la cual ellos votaron. Nosotros los que jamás traicionaríamos nuestro proceso, oímos con cierta sorpresa la Crónica de una Muerte anunciada al dar los escrutinios, ya el panorama  político lo indicaba, meses antes habíamos visto  a un ministro de Alimentación y al director del organismo encargado de enfrentar la Guerra económica, realizando operativos juntos, ambos personajes decomisaban en un  local de Catia 70 toneladas de azúcar, para vendérsela luego a las panaderías, panaderías que también le habían declarado la Guerra al Pueblo. Eso nos hizo ver lo que nuestro Presidente no pudo ver, quizás por su inexperiencia Política o tal vez por Inocencia, el no pudo darse cuenta de que la Guerra Económica, no era enfrentada, simplemente era ayudada desde adentro por esos dos Corruptos. A esta hora aun se mantienen en sus cargos, probablemente en Miraflores harán algún ENROQUE, (te quito de aquí y te pongo aquí), ya estamos hastiados de ver esas malas jugadas, tenemos años viendo las mismas caras, Jacqueline Faria, Elias Jaua, Héctor Rodríguez, Iván Gil, Reinaldo Iturriza, Rodolfo Marco, Rafael Ramírez, Nancy Pérez, Ricardo Molina. Y así repetidamente, pareciese que dentro de los casi 8 millones de Chavistas, no hay nadie más que esos mismos personajes, y son precisamente ellos los que casi hacen perder una elección presidencial, y fueron ellos los causantes de esta derrota aplastante en la Asamblea Nacional. Lamentablemente seguirán allí, no habrá nada ni nadie que haga al Presidente reflexionar y mandarlos a todos de vacaciones permanentes. De ser así, ellos también estarán cavando la fosa de nuestra revolución y probablemente la de muchos de nosotros cuando seamos eliminados por las balas del Fascismo.